martes, 20 de julio de 2010

Calcio bello

Rafa Benítez se ha desmarcado. Recién llegado a Milán, ya con un italiano correcto, ha visitado la redacción de La Gazzetta Dello Sport y ha revolucionado la conciencia interista. Ahora que habían encontrado la fórmula del triunfo, que casi tenían olvidadas las carreras de empates, el técnico español dice querer jugar a otra cosa. Benítez habla de ‘estilo Barça’, posesión de balón y dominio de la belleza. No imagino a Massimo Moratti, que por fin debe sentirse un negociador aceptable, esperando unas declaraciones así. El máximo dirigente del Inter había encontrado un proyecto que merecía continuidad, que superaba sus ridículos históricos. Tras la marcha de Mourinho a Madrid, Moratti debió conciliar el sueño cuando se fijó en Benítez, lo más parecido al portugués en el mercado: Disciplina, rigor táctico y éxito europeo. Sin embargo, aunque pueda parecerlo, las supuestas intenciones del extremeño no tienen un origen absurdo. El rival de la ciudad lleva años jugando atractivo -para más ahínco han contratado a un técnico de apellido Allegri. La Juventus ha convencido a Del Neri para sacarles de la mediocridad. E incluso un perdedor empedernido como Ranieri ha cuajado en Roma jugando con gusto. No iba a ser menos Benítez, al menos de palabra.


Han estado bastante hábiles los compañeros de La Gazzetta al editar el vídeo de la visita de Benítez. Con Timbaland de fondo, uno no puede evitar preguntarse qué hace un tipo con esos principios en un lugar como la sociedad negriazul. Encaja mucho mejor el Rafa de siempre, el comparable a las pizarras de Helenio Herrera y al profundo estudio de Mourinho. Quizá la manifestación de hoy sea sólo eso, un quiebro, un engaño. Quizá no y sea verdad que el Inter se une a la tendencia de los grandes de Italia, en busca de Zemanlandia. En todo caso, el que tiene una tarea ardua es Luigi del Neri en Turín. El técnico de l’Aquila quiere convertir la miseria juventina en un sucedáneo de su brillante Sampdoria. El primer movimiento ha sido el fichaje de jugadores de banda, Simone Pepe, Lanzafame, Jorge Martínez. Jugadores de perfil medio bajo, pero idea grandiosa de conjunto. Confiar en Diego, sentar a Del Piero, usar los carriles y un sólo delantero. El éxito final lo consolidará la solución que dé al doble pivote. A menos Melo, más simpatía.


Mientras en el Milan innovan -han adquirido a Marco Amelia, portero de 28 años-, en Roma Totti ha vuelto a ser el foco de la noticia. No en vano da más información giallorossa su página web que no el sitio oficial del club. La Roma es Totti, lo sabe bien Adriano, cuyas primeras palabras en la capital fueron dedicadas al capitán. Hoy Francesco ha dicho que pensó en dejar el fútbol hace unos meses, cuando pateó a Balotelli. Para los conocedores de su libro de chistes, quizá es más noticioso que pensara que no la propia idea. La retirada hubiera sido incoherente. Que el mejor talento de la pasada década en Italia abandonase ahora, cuando los cuatro grandes se entregan -o eso dicen- a la fantasía.




No hay comentarios:

Publicar un comentario